miércoles, 7 de mayo de 2025

CORONACIÓN DEL ABAD

 Cuenta la leyenda que desde el palacio condal y el monasterio de San Vicente do Pino, en Monforte de Lemos, había un pasadizo.


Éste era utilizado por el abad cuando el conde estaba ausente  para acostarse  con la esposa del conde de Lemos.


Al regresar el conde al palacio tras una encomienda que le había hecho el rey, se entera de aquella aventura amorosa.


Planea su venganza y decide organizar una fabulosa comida invitando como comensal de honor al abad.


Mientras se sirven los postres, el conde da orden a sus vasallos de que traigan el premio principal, una mitra de hierro candente con la que corona  al abad, ocasionándole una espantosa muerte.


El extraño triángulo amoroso trajo la muerte.


sábado, 3 de mayo de 2025

AMAROK

 Cuenta la leyenda que hace muchos años un lobo de gran tamaño y solitario hizo un pacto con el pueblo inuit: ellos no cazaban de noche y él les protegería de cualquier peligro que pudieran acecharles.


Vivieron en paz durante mucho tiempo hasta que un atardecer aparecieron unos hombres, unos cazadores, que buscaban a un ser de grandes dimensiones con forma de lobo para matarlo.


Los habitantes de la aldea les suplicaron que no cazaran de noche que esperaran al alba, sería más seguros para ellos.


Pero tras beber en la taberna hasta que la sobriedad dio paso a la embriaguez. Envalentonados por el estado en el que estaban hicieron caso omiso de las súplicas de la gente del pueblo y salieron al bosque a dar caza a aquel ser llamado Amarok.


El gran lobo los olió y los escuchó caminando por el bosque. Silencioso se fue acercando a ellos. Eran una gran grupo de hombres. Pero aquello no sería un impedimento para darles caza. Al final la presa daría caza al cazador.


Empezó a hacer ruido entre la maleza. El cabecilla de aquel grupo sugirió que se separaran. Le habían facilitado las cosas al gran lobo sin querer. Amarok  fue cazando uno a uno, no los mataba, los engullía vivos porque Amarok roba las almas de los cazadores. Aquella energía que habitaba en su interior hacía que fuera más poderoso.


DESESPERANZA

  La alegría de haber conocido a Sara, de casualidad, en la biblioteca donde él trabajaba en su último poemario y ella era la bibliotecaria....